El secreto de la doble inyección

10 sept. 2018

El secreto de la doble inyección

La Técnica

El proceso de moldeado conocido como Doble Inyección o Double-Shot Moulding consiste en el moldeado de un material (plástico en este caso) alrededor de una preforma para combinar ambos materiales en uno. Primero, se moldea la pieza inicial pasando ésta a un segundo molde donde recibe una segunda inyección de material para que ambos materiales queden unidos en una sola pieza.

Es una técnica poco extendida en nuestro sector aún, siendo en Solera unos de los pocos que la empleamos para nuestros procesos. No obstante, no por ello ha de pensarse que esta metodología fue creada recientemente.

El Secreto estaba ahí

En realidad, se lleva empleando desde los años 70; si bien con una aplicación distinta a la nuestra actual. Se usaba para fabricar teclas de teclado de ordenador, donde el mecanismo de cada tecla es recubierto con un segundo material que conforma la parte verdaderamente visible de la tecla. De este modo, se fabricaban teclas con mecanismos no solamente contenidos, sino unificados.

Con la llegada de los teclados de membrana, los teclados mecánicos y, por ende, las teclas fabricadas con este método fueron quedando relegados como producto residual a finales de la década de los 90. El “clac” “clac” de las ruidosas piezas mecánicas fue desapareciendo gradualmente a medida que las empresas actualizaban sus equipos, siendo sustituido por los más discretos y apagados “tac” “tac” de los teclados de membrana. No obstante, esto no significó el fin de la técnica puesto que la tecnología que un sector abandona puede ser la tecnología que otro sector aproveche. Es aquí donde entramos nosotros.

Sólo había que re-descubrirlo

Si bien la capacidad de aunar dos piezas en una para aprovechar las capacidades de ambas resulta una ventaja atractiva (mecanismo + cobertura), no es la única aplicación aprovechable de este método de fabricación.

Al emplear dos plásticos compatibles, se pueden adherir de tal forma que se produzca una unión a nivel molecular, asegurando la ausencia de fugas en la pieza final, garantizando el sellado del producto.

Además, supone una mejora de procesos que repercute en una mayor eficiencia en la fabricación, al realizar ahora una máquina el trabajo que anteriormente realizaban dos; sin contar con la seguridad añadida en el manejo del producto que antes era transportado manualmente de una máquina a otra, no siendo necesario ahora al ocurrir todo en el mismo sitio.

En Solera avanzamos hacia el futuro, sin dejar atrás el presente.

Las invenciones no nacen para ser desechadas cuando pierden aplicación, sino para resurgir con utilidades nunca vistas a través de la innovación.